Navidades catalanas.

La navidad catalana es curiosa, a la gente de fuera le parece normal, pero hay dos diferencias: el caganer y el tió. ¿Que tienen en común? Cagar. Técnicamente hablando la navidad catalana es una mierda. Y es que por alguna razón en estas fechas tenemos un espíritu demasiado escatológico.

La primera es la más conocida, el caganer, o caganero creo que se llama en castellano, es simplemente un tipo con barretina (algo vital) cagando en el belén. ¿Por qué ponemos a un tipo cagando en medio del belén? Pues simple, ¿por qué no?
La mejor razón para hacer algo.
Hasta donde llega mi conocimiento, en sitios como galicia el caganer es conocido, aunque no se si se suele poner en el belén.
Lo que es cierto es que el caganer es cada año más fuerte en nuestra cultura, ha pasado de ser un pastorcillo a ser un futbolista a tu elección, un político, cantante... cualquier figura famosa que exista, nacional o internacional puede cagar en tu casa.
Vivimos en una época maravillosa.
Sin embargo tengo una gran queja, pues se le hace una gran injusticia al caganer. ¡En absolutamente ningún belén viviente que encuentres por la calle te encontrarás a un caganer!
Exijo que en todos los belenes vivientes haya un tipo en barretina cagando, que se le den laxantes para que aguante más tiempo en su papel, o que se contraten a varios caganers y se vayan rotando, pero un belén no es velen si alguien cagando.

La segunda tradición no la conoce tanta gente, aunque aún así es algo conocida. Sin embargo explicarla en Chile fue toda una experiencia, nadie se creía que de verdad hacíamos eso.
Para los que no conozcan al tió, se trata de un tronco, con dos patitas alante, una cara sonriente y una barretina (otra vez, algo vital).

Ponemos al tronco en el salón, lo alimentamos, lo cuidamos, cada día le pones delante turrón y naranjas y la comida que más le guste a los padres del niño que tenga el tió y por la noche el tió se la come mágicamente. Es increible pero pasa, lo juro.
Entonces, después de tratarlo como a un dios, cuidandolo y alimentandolo, decides agarrar un palo y darle una paliza.
Lo revientas a palos. Y encima cantas:
Caga tió 
caga turrón 
si no cagas turrón 
te pegare con un palo
A tener en cuenta que mientras le dices que le pegarás con un palo si no te da regalos, ya le estas dando con el palo. Le amenazas por vicio, las hostias no se las quita ya nadie.
Y entonces magicamente el tió caga regalos y dulces.
Exacto, en cataluña los regalos nos los cagan.

Ahora en serio, en mi casa siemre se daban los regalos en navidad, sin embargo en el clegio celebravamos el tió. Nos daban un detalle a cada niño, eso es algo que pocos colegios hacen. Y sinceramente, el tener a la figura mágica que nos daría regalos delante, alimentarle y luego matarlo a palos todos los niños en grupo mientras cantábamos juntos era una experiencia genial. Una tradición digna de defenderse.

Además, el tió se celebra antes de navidad, por lo que los niños tendrán muchos más días de vacaciones para jugar con sus regalos, no como los niños de las familias que dan regalos en los reyes magos porque "son más nuestros", dejándoles apenas 3 días para jugar antes de ir a clase. En serio, esos padres son unos cabrones.

2 comentarios:

  1. Yo la primera vez que vi lo del tió fue viendo Plats Bruts (best serie ever) y la verdad me pareció un puntazo lo de que se pusiesen a darle palos al tronco para darse los regalos. Luego más tarde ya me contaron lo de que había que cuidarlo y toda la parafernalia. Otra cosa no, pero los catalanes sois unos cachondos.

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